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La noche.

Esta historia fue relatada por una amiga. Sábado 21 de noviembre de 2015 Hora: 12:25 p.m. Es verdad que todos podemos vivir una misma situación, pero jamás la recordaremos todos de la misma manera. Era domingo en la noche más o menos las 6 de la tarde, hablaba con Martínez, no recuerdo sobre qué y a lo mejor no tenga importancia. Los recuerdos son algo borrosos, no me había bañado, pero el día anterior había quedado en ver con un compañero de la U, una película, “Sinsajo" y dijo que quizá cocinaría algo. Mientras tanto en mi mente: Ojalá haga arroz con pollo, oh por Dios el arroz con pollo seduce a cualquiera, arroz con pollo everywhere, arroz con pollo para todos. Okay, no ¿por qué haría eso? Eso solo lo hace mi mamá, porque me ama. Él no, a duras penas somos amigos… pero me agrada, habla cosas interesantes, lo escucharía hablar por horas, obvio no solo para mí, para todos… en una audiencia, ¿Por qué hablaría frente a una audiencia? No es Hitler; por cierto Hitler se

Perro sin Sangre

  He pasado días enteros pensando en que debería sentarme a escribir como una estrategia de organizar las ideas en mi cabeza y sin embargo hoy cuando abrí este bloc de notas nada ha salido de mí. Con certeza sé que no estoy vacía y que quizás lo que ocurre es que no quiero enfrentarme a mí, quiero perderme el rastro, ocuparme en otras cosas y que sigan pasando los meses con resentimiento. Leí en algún lugar que el resentimiento es una forma de mantener a alguien vivo dentro de nosotros, que es una forma de no hacer el luto, de tenerlo ahí y seguramente así sea.  He sentido ira, he sentido intenso dolor, me he comparado con sus ex siempre llegando a la conclusión de que soy mucho mejor ¿Tiene sentido? Por supuesto que no, ningún hombre merece que yo desperdicie mi tiempo así ni que odie a otra mujer porque lo dañó y luego el imbécil quiso dañarme a mí, porque si ese espacio ya estaba ocupado por alguien más, no debió dejarme entrar a mí. Él insiste en que… ¿Bueno saben qué? a quién le i

Para Manolo

El día que te conocí pensé varias cosas - como es común en todas las primeras veces- Lo que más recuerdo es el blazer que tenías puesto con unos detallitos bordados, me recordaron a un personaje de una película que alguna vez vi combinado con unas botas tal como las que tenías tú, con la diferencia de que el personaje tenía un sombrero y un cigarrillo en la mano, seguramente alguna vez también te has visto así, me pareció curioso pero lo dejé pasar. Camino a los wafles no sabía muy bien de qué hablar, nunca lo he sabido, nunca he sido una persona conversadora y además esa vez estaba frente a un desconocido. No me fijé demasiado en tus tuits porque creo que es una red donde mostramos una imagen un poco distorsionada de nosotros mismos, una proyección errada como la de Mercator pero que se ha vendido como real por años. Comimos y nos sentamos en el parque, empezaste hablar de lo que hacías, yo no entendía nada, no tenía ni idea quiénes eran los poetas malditos y no puedo recordar la mayo

Me llamaron G o r d a

Esta mañana en cuanto desperté y tomé el celular el primer mensaje que leí decía: "A ti delgada te casarían de una" y supongo yo, que es el equivalente de: "Tú eres muy bonita de cara" a lo que yo en otras circunstancias habría contestado con un: "Oye desadaptado, yo soy bonita de todo, gracias, pero eso no es un halago" a pesar de eso, no tardé mucho en darme cuenta en que contestarle solo lo motivaría a responderme de manera aun más "ofensiva". Recuerdo que a los 9 años, tenía un padrastro que me amarraba una cabuya a la cintura, y me decía que era para definirla, pero que en lugar de eso parecía un ocho, no entiendo por qué a los 9 años una niña tenía que preocuparse por eso. A medida que fui creciendo mis tías y mi abuela me decían que debía hacer dieta porque "A las gordas solo las quiere la mamá" asunto que en su momento me creí completito; mi hermana menor, la cual tiene 5 años menos que yo, al escuchar todo eso, le dijo un dí

Yo le digo SÍ a la paz.

Yo apoyo el sí al plebiscito, porque no hay razones por las que no se pueda alcanzar la paz, aun dada la violencia de sus múltiples autores del conflicto, porque hay dos países garantes, entre ellos Noruega que tiene tradición en la resolución de conflictos. Cada país hace su paz como puede, y quien no quiere la paz no la merece. Colombia se caracteriza por tener la insurgencia armada más prologada de América Latina y el perdón es el único camino para alcanzar la paz, esto no es cuestión de ingenuidad, es cuestión de esperanza, no resistiría el no saber qué habría pasado si hubiera votado al sí. Desde el año 82 se comenzó el primer proceso de paz en Colombia, durante el mandato de Belisario Betancur, se abrieron mesas de discusión pero nunca se llegó a nada, algo similar pasó durante el gobierno de Virgilio Barco, quien no entendió que una negociación consiste en que las dos partes obtengan un beneficio, en lugar de simplemente reafirmar la autoridad de uno de los dos lados, además de

Creo que morí.

Anoche parecía una noche como cualquier otra, después de hablar un rato con mis amigos, me fui a la cama a eso de las 12, cuando estaba por llegar al reino de Morfeo, escuché una voz de un hombre que me decía: "perdón". Desperté a eso de las 2:45 y  me volví a dormir, y este sueño que tuve fue muy extraño. En el sueño estábamos al parecer en un centro comercial, cuando digo estábamos me refiero a mi prima Catalina, su mamá, su hermano Christian, mi hermana Alejandra, mi tio René y yo. Catalina, su mamá y su hermano estaban sentados comiendo un helado, conversando y riendo; a un lado de Catalina estaba mi tío con una camisa azul con rayas, el cabello canoso, la piel intacta y incluso un poco gordito, nadie parecía tenerlo en cuenta, es como si no lo pudieran ver, pero él me podía ver y yo a él; luego llegó mi hermana Alejandra casi corriendo y los saludó, pareció no verme, lo extraño es que tampoco a mi tío, él también estaba contento, aunque nunca articuló palabra alguna, d

Respuesta a inanición

Hoy después de tanto me pregunto por ella cada noche antes de dormir y cada mañana al despertarme, trato de desprenderme de la mente y del corazón el sentimiento nefasto que dejo en mí cuando se fue. Trato de analizar todo, pero por más que quiera mis esfuerzos son en vano. Estoy dolida, el sentimiento  amarga cada segundo de mi preciada existencia. Pero, qué más da. Sé que la imagen que tiene de mi cambió; quisiera poder explicarle que soy una persona impulsiva, que dice las cosas sin pensar, solo por el desespero de herir, que cada una de las palabras lleguen como navajas al corazón, no importa que no quiera hacerlo en realidad. Lo hago. Ella sabe que la amo con cada fibra de mí ser. Y que así no se lo diga nunca, es mi persona favorita. Es más, puedo recordar aun la razón por la que surgió todo lo que está pasando. De una discusión a otra terminé sacando sus cosas fuera de nuestra habitación, mientras lo hacía me decía “¿Qué estoy haciendo? Es mi hermana” pero la ira me consumía y t

Inanición de sentimientos

Me amordaza y me angustia el pasar de los días sin que ella note mi ausencia. Quise irme sin despedirme pensando que eso iba a hacer que ella pensara en el porqué de mi comportamiento,  pero no pasó,  son deseos ilusos e inconclusos, porque cuando alguien no te quiere no puedes pretender que mediante la culpa milagrosamente comience a hacerlo. Pocas veces voy a casa en el año,  y para llegar debo tomar dos buses, en cada uno tardo 4 horas, además tengo que cargar maletas muy pesadas, y sinceramente creo que lo valen porque cuando estoy lejos mi anhelo constante es regresar a casa. Mi casa es más bien pequeña, dos habitaciones,  un patio grande, una cocina, un garaje, local y dos baños ,  supongo que así es como la describiría un arquitecto o cómo sonaría un anuncio en el periódico si alguien quisiera venderla... pero para mí no lo es, para mí es un hogar caluroso, aunque acogedor, donde se encuentran mis cosas favoritas y mis personas favoritas, hablo de mi mamá y mi hermana menor. An